jueves, 19 de abril de 2012

OVNI EN FORMA DE DISCO


Arriba: Ovni con forma de disco fotografiado por el señor Myldderman en Namur (Bélgica) el 5 de junio de 1955. El Objeto, que se desplazaba por la parte alta del cielo, se movía de forma errática y emitía un reguero de vapor.

BOLA DE FUEGO QUE AVANZA LENTAMENTE


Fotografía de lo que parecía "una bola de fuego que avanzaba lentamente", tomada por el señor Sutton, de Piedmont (Missuri, Estados Unidos), el 22 de marzo de 1973. No existe una explicación convencional o astronómica para ello.

OBJETO EXTRAÑO



Objeto fotografiado sobre Bear Mountain (Nueva York) por un testigo anónimo el 18 de diciembre de 1966. La fotografía fue analizada por el proyecto Blue Book de la Fuerza Aérea Norteamericana, ademas de realizar una exhaustiva entrevista al testigo. Los técnicos militares no encontraron evidencia de que fuera fraude alguno. Fue clasificado como "no identificado".

OVNI EN MAR DE BRASIL


A comienzos de enero de 1958, un barco de vigilancia de la Arma da brasileña, el Almirante Saldanha, tomó fotografías desde su cubierta de un Ovni. El fotógrafo dijo que el objeto no emitía ruido alguno, que era de color gris oscuro, y que parecía estar rodeado de una neblina verdosa. Ejército brasileño examinó los negativos. Se comprobó que eran auténticos, y se descartó cualquier fraude o engaño.

FOTO DE OBJETO EXTRAÑO


Fotografía tomada por un fotógrafo londinense, Anwar Hussein, en los Pirineos españoles en julio de 1978. Al regresar a Londres hizo revelar la película: recibió una llamada del laboratorio en la que le señalaban la existencia de un "objeto" en la película, y creyó que se trataba de un defecto del negativo. Sin embargo, al examinarla se comprobó que la emulsión no estaba dañada.

CINCO PROFESORES VIERON UN OVNI


El 25 de agosto de 1951, cinco profesores y un post-graduado vieron una formación de luces brillantes que volaban velozmente por el cielo. Estimaron su velocidad en unos 2.900 kilómetros por hora a una altura de unos 1.500 metros. Los escépticos afirmaron que las luces eran los reflejos de los vientres de una bandada de patos; lo curioso es que volaban a más de 200 kilómetros por hora.